Editorial

 

Cuadernos de Economía Crítica es fruto del trabajo colectivo en el marco de la Sociedad de Economía Crítica (SEC) de Argentina y Uruguay. Nace con el ambicioso objetivo de profundizar el desarrollo y difusión de una perspectiva crítica en economía. La misma perspectiva que sabemos todavía falta en la abrumadora mayoría de las currículas de nuestras escuelas y universidades.

 

Tenemos claro que el debate de ideas que pretendemos para la revista depende exclusivamente de las contribuciones que, desde distintos enfoques teóricos y metodológicos, otros/as quieran compartir con nosotros/as. En tanto aporten a la construcción de una mirada plural y crítica, desde el Comité Editorial asumimos el compromiso de fomentarlo. En este sentido, el próximo número de Cuadernos de Economía Crítica incorporará un Dossier, el primero de la revista, que pretende reunir una serie de reflexiones en torno a la controversia sobre la pluralidad de la enseñanza en economía y los retos para el siglo XXI. Buscamos contribuciones que discutan la calidad de la enseñanza de economía y sus implicaciones, a la vez que amplíen el debate recurriendo a distintas perspectivas, donde se planteen interrogantes esenciales como: qué temáticas componen el objeto de estudio de la economía y han sido excluidas de la disciplina, por qué la variedad de metodologías posibles se ve reducida a un conjunto limitado de técnicas (discusión sobre el rol de la matemática y la econometría), cómo la perspectiva teórica condiciona la construcción de los problemas económicos, cómo se establecen diálogos con otras disciplinas y para qué, qué limitaciones se hallan en la actual configuración de los planes de estudio y qué impacto tiene en la formación profesional (académica o no), análisis de experiencias exitosas de alternativas de formación, entre otras.

 

Elaborar una revista académica de las características de Cuadernos de Economía Crítica implica, para todos/as aquellos/as que formamos parte de la SEC, un importante paso hacia adelante en ese largo camino que constituye la pelea por la democratización de la enseñanza de la economía, la pluralidad de pensamiento y la producción de conocimientos socialmente orientada. Esperamos que estas propuestas puedan encontrar su lugar en los planes de estudio de nuestras carreras de Economía: Cuadernos aporta a esta tarea con material concreto (investigaciones, debates, intervenciones, etc.).

 

Se trata de un importante paso que se suma a otros; algunos más viejos y otros más nuevos. En 1997 fueron fundadas las Escuelas de Economía Política en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y la Universidad de Buenos Aires (UBA). Se constituyeron como espacios extracurriculares con el objeto de difundir, discutir y producir pensamiento crítico en el seno de sus respectivas Facultades de Ciencias Económicas, ambas flagradas y hegemonizadas por la doctrina neoclásica. Diez años después, en 2007, se lanzaron las primeras Jornadas de Economía Crítica (JEC) en la UNLP, apuntando ya no sólo a la posibilidad de debatir y formarse teóricamente, sino también a la intención de comenzar a presentar trabajos para su discusión. Cada Jornada de Economía Crítica contó con una participación creciente de economistas de Argentina, Uruguay y del resto de los países latinoamericanos. Las JEC fueron cobijadas sucesivamente en las universidades de Bahía Blanca, Rosario, Córdoba, Buenos Aires, Cuyo y, nuevamente, en 2014, en La Plata. La calidad de los debates y la experiencia acumulada propiciaron aprendizajes mutuos y nuevas iniciativas. Así en 2012, se desarrolló la primera edición de la Escuela de Verano de Economía Crítica (EVEC) en Calmayo (Córdoba), un espacio orientado al estudio intensivo de la economía política y su crítica en un contexto de convivencia y camaradería, donde los/as participantes asumen la responsabilidad de organizar el trabajo necesario para llevar a cabo el encuentro. Esas experiencias se repitieron anualmente en Funes (Rosario), en Libertad (Uruguay) y en Paraná. Como producto de este trabajo extendido en las diversas universidades, el 6 de marzo de 2013, se fundó nuestra Sociedad de Economía Crítica (SEC), con actos simultáneos en La Plata, Córdoba y Mendoza. En todos estos años, la SEC no sólo creció en formación y producción, sino también en organización. No existe posibilidad alguna de concretar las transformaciones que nos proponemos sin establecer lazos firmes entre todos los que nos abrigamos ese objetivo. Así lo hemos entendido desde el primer día. Los Cuadernos forman parte activa de esta construcción colectiva, son incomprensibles fuera de ella.

 

Este año será el turno de las VIII JEC, a realizarse en septiembre en la Ciudad de Río Cuarto (Córdoba, Argentina). Las jornadas se han instalado como un espacio reconocido entre los congresos de economía y, muy probablemente, en el evento de mayor participación en la disciplina, tanto en términos de los trabajos presentados (más de 200 cada año) como en términos de asistentes (alcanzando el récord de 1500 personas en su última edición). Esto es algo que debemos celebrar y reconocer: el interés generalizado por incorporar perspectivas críticas no es una entelequia, sino una demanda expresada multitudinariamente.

 

Sin embargo, impulsar un proyecto de este alcance y extender nuestra voz en pos de la pluralidad como eje central en la elaboración del pensamiento crítico puede generar resistencias y enfrentamientos. En febrero de este año, Guillermo Gigliani, uno de los miembros de nuestro Comité Editorial, fue cesanteado en su cargo de profesor de Dinero, Crédito y Bancos en la UBA. La razón esgrimida por las autoridades fue que Gigliani debía tramitar la jubilación, a pesar de que había optado expresamente por la opción de continuar dando clase, de acuerdo a lo dispuesto por la ley nacional de docentes universitarios. Frente a la enorme movilización de profesores y estudiantes de Económicas y del resto de las facultades, las autoridades se vieron obligadas a retroceder y a restituirlo en su curso. Lamentablemente, no se trata del único caso con estas características, sino de uno que tomamos por representativo.

 

 

Las decisiones de este tipo, que en la UBA son reiteradas, nos dejan ver que el pensamiento único no se impone sólo a partir de la repetición normalizada de posturas teóricas (e ideológicas), sino también a partir de posiciones de poder de burocracias que se perpetúan en el gobierno universitario gracias a regímenes de democracia restringida. Los atropellos a la pluralidad y a la democracia se expresan, entre otras formas, en la anulación de perspectivas críticas, diferentes. Cuadernos de Economía Crítica repudia esta clase de actos, y reafirma su vocación de aportar a una formación crítica, que permita una disciplina democrática y comprometida con el cambio social.